El 7 de marzo de 2024 se celebró la, hasta fecha de hoy, última reunión del Banco Central Europeo. El sector financiero no esperaba una bajada de tipos pero sí esperaban intuir con las declaraciones posteriores de Christine Lagarde cuándo se produciría. Sin embargo, las respuestas fueron ambiguas. Así que, la pregunta sigue en el aire; ¿Cuándo bajarán los tipos?
Revisemos el histórico; la subida de tipos de interés
Tras meses acumulando un aumento constante de la inflación debido a la pandemia y la Guerra de Ucrania, llegó una noticia que no veíamos desde hace más de una década; el Banco Central Europeo aumentó sus tipos oficiales.
El tipo de interés principal pasó de estar durante 11 años al 0% a aumentar al 0,5%. Pero esta sería la primera de un total de diez subidas de tipos que han ubicado el tipo principal en un 4,5%.
¿Por qué suben los tipos de interés?
La subida de tipos está directamente relacionada con la inflación. Si los tipos de interés están bajos, el precio del dinero es bajo y por lo tanto, tenemos una mayor capacidad de compra. Sin embargo, aumentando el tipo de interés, aumentamos el precio del dinero, disminuyendo la capacidad adquisitiva de las personas. Y, si compramos menos, los precios bajan, y también lo hace la inflación.
Paralelamente, el BCE también aumentó la tasa de depósito, incentivando así el ahorro. Por eso, durante 2023, muchas entidades bancarias incentivaron por primera vez en diez años las cuentas de ahorro.
¿Y por qué sube el Euríbor?
El Euríbor es el tipo de interés al que los bancos europeos se prestan el dinero entre sí. Por eso está intrínsecamente relacionado con los tipos de interés. El tipo de interés principal del BCE marca el precio al que la institución presta dinero a las entidades. Por lo tanto, si estas tienen que pagar un interés más alto por el dinero, también harán lo propio en operaciones con otras entidades.
Por eso, la subida de tipos de interés provocó también un aumento histórico del Euríbor, que se situó en máximos desde los años de la burbuja inmobiliaria.
Ahora que el sector prevé una próxima bajada de tipos, el Euríbor está empezando a descender. Pero, al no tener un anuncio oficial por parte del BCE, el descenso está siendo moderado.
La pregunta del millón; ¿Cuándo bajarán los tipos de interés?
La evolución de la inflación de la zona Euro
En este sentido, podemos hacer predicciones. Pero si algo nos ha enseñado los últimos años, es que todo puede cambiar en un día.
La zona Euro registró el pico más alto de inflación en octubre de 2022, cuando se situó en el 11,5%. En enero de 2024, como consecuencia de la política monetaria, ya estaba en un 3,1%.
En cuanto a la inflación anual, en enero de 2023 fue del 8,6%, frente al 2,8% registrado en enero de 2024.
Pero, estas cifras se mantienen aún muy alejadas del objetivo del 2% que tiene el BCE.
Las últimas declaraciones del BCE
Tras la reunión celebrada el 7 de marzo de 2024, Christine Lagarde advirtió que, aunque la inflación se esté moderando, no quieren tomar decisiones precipitadas: “Lo último que querría ver es que tomemos una decisión apresurada, que la inflación vuelva a subir y tengamos que tomar más medidas». Y es que, estamos experimentando un proceso de desinflación que el BCE prevé que se mantenga este 2024, pero aún no quiso anticipar cuándo tomarán la decisión de bajar el precio del dinero.
Los bancos se anticipan a la bajada de tipos
Ante la necesidad de incentivar la financiación y la senda positiva de la inflación, las entidades financieras han decidido adelantarse. Desde inicios de 2024 varios bancos han mejorado sus ofertas, tanto a tipo fijo como mixto. Actualmente, encontramos incluso tipos de interés inferiores al 2%.
Pero, ante la advertencia del BCE de que la institución no tomará decisiones precipitadas, no debemos confiarnos. La mayoría de expertos apuntan a una bajada de tipos de interés en junio. Pero, si esta no se produce, es probable que los bancos se vean obligados a congelar, o incluso aumentar, sus tipos.
Por eso, no es buena idea dejar para mañana la decisión de comprar una vivienda ahora que podemos conseguir ofertas atractivas. Sería tomar una decisión arriesgada, en un entorno cambiante, que podría llevarnos a perder buenas oportunidades.
